La consolidación del comercio online como nueva forma de negocio ha generado grandes impactos en áreas como la cadena de suministro. Hemos pasado de tener una logística orientada a la empresa a estar enfocada den mayor medida al cliente final. Esto se ha debido a cuestiones como el aumento de visibilidad de las operaciones logísticas y de distribución y la presencia del ya comentado e-Commerce.
Al haber un gran número de comercios de manera únicamente online el valor añadido pasa de estar en las tiendas físicas a la parte en la que el cliente recibe su producto, es decir, la logística. En España este hecho lo podemos ver reflejado en datos. Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia – CNMC – la facturación del comercio electrónico en el país aumentó el segundo trimestre de 2022 un 33,1%, llegando a alcanzar los 18.190 millones de euros. Este hecho supone una simple cuestión: el cambio ha llegado.
Es en este escenario donde un nuevo paradigma se abre camino sobre el futuro del sector, y para ello debemos conocer en qué áreas afecta esta transición.
Factores clave
Hay una serie de fases en los que este cambio de modelo de distribución, pasando de ser de B2B – business to business – a uno B2C – business to consumer – afectan de manera directa. Es por tanto que tantos negocios dedicados a la logística ya han dado el paso de tratar de adaptar sus operativas a esta nueva forma de manejar la cadena de suministro. Pero para ello, se debe poner el foco en aspectos como:
Modelo de pedidos
El mundo de la logística está acostumbrado a manejar granes pedidos realizados para entregar en un sitio específico y planeados con anticipación. En esta nueva realidad las exigencias de los clientes son todo lo contrario: pedidos pequeños, personalizables, hechos al momento y con la esperanza de tenerlos lo antes posible. Pese a que en la actualidad hacer frente a este nuevo escenario es posible, si la tendencia continúa en alza se deberán hacer cambios en esta parte de la organización para poder adaptarla a las nuevas exigencias que la rodean.
Transporte
Otra gran cuestión que se ve directamente afectada es la manera en la que los camiones transportan dicha mercancía. Al cambiar la forma en la que se tramitan y gestionan los pedidos la manera de distribuirlos debe cambiar si se quiere lograr mantener unos beneficios. Debido a las exigencias de velocidad que se depositan en los envíos en muchas ocasiones no resulta eficiente realizar ciertas entregas, el camión realiza ciertos trayectos vacíos y un largo etcétera. Por eso, ante este escenario en el que la frecuencia en la que se compra es mucho mayor a la par que las exigencias en reparto, adaptar el transporte ya sea mediante técnicas como el cross-docking como incorporando opciones de entrega diversas como los puntos de recogida se pude lograr obtener un equilibrio entre las necesidades del propio negocio y de los consumidores.
La sostenibilidad: ¿cómo va a afectar?
Esta nueva realidad de la que se ve directamente afectado el mundo de la logística y transporte no deja de estar influenciada por otro gran factor, reducir la huella de este sector. Y es que, siendo uno de los más contaminantes, este cambio de escenario no ha hecho más que impulsar la presencia de cada vez más actividad, lo que supone un inevitable crecimiento de contaminación causada por la logística.
Por ello la sostenibilidad ya se ha hecho camino en esta nueva forma de negocio B2C, y se han creado herramientas que si bien ayudan a hacer de este sector uno más respetuoso con el medio ambiente, también permiten mejorar aspectos cruciales para impulsar una mejor gestión de las operativas. Entre ellos destaca la incorporación de vehículos eléctricos – mayoritariamente en las entregas de última milla -, planificación de rutas, optimización de espacio y uso de materiales sostenibles para embalar los paquetes.
El nuevo contexto en el que se desarrolla la distribución ya está aquí, pero las influencias en la logística no paran. No sólo cambia el modo en el que se abordan los envíos sino también la manera más efectiva y sostenible de hacerlos. Ahí residirá el valor añadido de todo negocio.